
Nuestra mirada dice mucho de nosotros, por lo que es importante que hagamos uso de todo lo que esté a nuestro alcance para disfrutar de una bonita mirada.
Qué expresa mi mirada
Nuestra mirada expresa mucho más de lo que pensamos. En primer lugar, es uno de los principales lugares donde se puede apreciar nuestro estado de ánimo. Por otra parte, se trata de una zona muy característica y que modifica considerablemente nuestra expresión.
Esto significa que unos ojos mal cuidados pueden dar la sensación de que estemos tristes o cansados cuando en realidad no es así.
Por otra parte, la mirada también es una de las primeras cosas que causa efecto a la hora de conocer a alguien. Ya sea para resultar atractivos o para dar una imagen de mayor confianza, es importante que cuidemos bien nuestros ojos para tener una mirada perfecta.
Los defectos en la mirada
También hay que tener en cuenta que si nuestros ojos tienen algún tipo de pequeño defecto como ojeras, bolsas, párpados caídos, etcétera, aunque a simple vista no sea algo en lo que nos fijemos, el conjunto de nuestra mirada sí se verá afectado.
Esto tiene su parte positiva y su parte negativa. En cuanto a la parte positiva tenemos el hecho de que la mayor parte de la gente no se da cuenta de estos desperfectos. Pero en el lado negativo encontramos que, al verse afectado todo el conjunto, la sensación será de que tenemos una mirada menos atractiva de lo que es en realidad.
Cuál es el objetivo de la blefaroplastia : simbólicamente tener una bonita mirada
Como muchos de vosotros ya sabéis, la blefaroplastia es la cirugía a través de la cual se procede a eliminar todas estas imperfecciones. Por la forma que conseguimos una mejor visión y un efecto mucho más rejuvenecido, se eliminan esas sensaciones de las que hablábamos en el punto anterior.
El objetivo principal de la blefaroplastia es, no sólo acabar con dichos desperfectos, sino conseguir una mirada natural. A la vez se pretende que no queden restos de cicatrices o tejidos mal cosidos que puedan dar un efecto peor todavía.
Por ello, desde aquí siempre recomendamos ponernos en manos de un médico profesional y que sea especialista en blefaroplastia. Con ello, no sólo conseguiremos mejores resultados sino que también podremos tener en este sentido la tranquilidad de que estamos siendo atendidos por alguien con experiencia y que sabe verdaderamente cómo debe proceder a la hora de realizar una blefaroplastia. Al final, se conseguirá tener una bonita mirada como simbólicamente hemos indicado.